Para la mateada

Presentación de la CAP

La CORRIENTE ABIERTA DE PARTICIPACIÓN es un aporte al proyecto nacional que encabezan Néstor y Cristina.
Es abierta en un doble sentido, porque convoca ampliamente a dirigentes y militantes que ya están comprometidos con éste proyecto, pero además procura construir con una metodología que permite incluir a quienes aún no saben cómo participar en el proceso político, pero se dan cuenta que algo importante se está jugando en la Argentina.
Y es de participación porque hay muchos compañeros y compañeras que quisieran hacer algo más que opinar y votar. Porque participar es abandonar el rol de espectadores pasivos. Es sentirse parte. Y en ésta etapa de la historia da ganas de sentirse y ser protagonistas. Porque participar tiene un sentido.
Éste borrador -simplemente un adelanto de lo que proponemos sea de elaboración colectiva- de losCuadernos de Apuntes para el Proyecto es una herramienta que creemos necesaria para la etapa que se avecina: una etapa que será de balance de lo realizado y de desafío para poder profundizar lo realizado.
Sabemos que hoy, en la democracia del siglo XXI, lo principal son las grandes políticas públicas desde el gobierno, la articulación electoral y la estrategia comunicacional masiva. Pero también sabemos que la militancia territorial y sectorial tiene todavía un papel para desempeñar a la hora de fortalecer una dimensión de la política que a veces es olvidada en tiempos tan mediatizados: la confianza, la mística y la convicción que sólo florece en las relaciones personales, en el cara a cara.
Nuestro proyecto nacional y popular es el único que hoy disputa políticamente con logros para mostrar, con antecedentes, causas y consecuencias, con anclaje en el pasado y proyección de futuro.
Tenemos una historia, una razón de ser, de soñar y de luchar. Y también tenemos el modo de transmitir todo esto, tenemos un relato para compartir de estos años de gobierno popular. Por eso podemos y debemos abrirnos a la construcción con amigos, vecinos, compañeros de estudio o de trabajo.
¿Cómo? Promoviendo la constitución de Círculos Abiertos de Participación. Reuniones periódicas, “mateadas” horizontales, amplias, donde el único requisito es no monopolizar la palabra. Cada militante puede ser un coordinador de estos círculos, de éstas mateadas. Un motivador, un distribuidor democrático de la participación, un colaborador para que otros entiendan que protagonizar la historia comienza por comprenderla y, de a poco, comprometerse con ella.
Éste primer CUADERNO es por lo tanto para ayudarnos a ser militantes que trabajan hacia afuera, hacia la sociedad y no en las interminables y fatigosas internas.
Sus secciones incluyen un ABC, lo que hay que saber, en éste caso el punto de partida, dónde estábamos entre el 2001 y el 2003.
Le sigue LO REALIZADO, que no es poco, ni casual, ni improvisado. De allí surge LO QUE NOS FALTA HACER, las tareas pendientes que justifican la necesidad de continuar y profundizar el proyecto político y el modelo de país.
En la sección MÍNIMO COMÚN MÚLTIPLO, encontramos que no estamos solos en el mundo y mucho menos en América Latina. Empezamos con algunos ejemplos de aquello que compartimos, pero hay muchos más.
En MÁXIMO COMÚN DIVISOR están los grandes parteaguas globales con las potencias hegemónicas, con ciertos organismos internacionales y con pensamientos que nos llevan al desastre como humanidad.
La sección LAS ZONCERAS DEL SIGLO XXI(homenaje práctico a Don Arturo Jauretche) ayuda a no perdernos en el día a día de la información y a develar las mentiras, mitos y trampas intelectuales de los formadores de opinión del orden conservador.
En PARA LA MATEADA van algunas ideas prácticas para desempeñarse como coordinador de los círculos y promover el debate, utilizando como complemento éste Cuaderno, vinculando la discusión de la coyuntura con el contexto y las cuestiones estructurales.


Los Círculos Abiertos de Participación

Para la mateada
Como ya dijimos, en la etapa que viene, la construcción debe orientarse hacia afuera, hacia la sociedad, hacia los diferentes grupos y sectores. Para ello proponemos convocar periódicamente a encuentros con vecinos, amigos, compañeros de estudio o trabajo que sin estar aún políticamente definidos manifiestan interés en conocer, comprender y eventualmente participar de este proyecto de transformaciones profundas que conducen Néstor y Cristina.
Llamaremos “mateadas” o Círculos Abiertos de Participación a estos espacios de encuentro cara a cara. Deben realizarse en ámbitos “amigables”: locales, clubes de barrio, aulas universitarias o incluso bares. Allí todos “nos bajamos del caballo” y nadie es más que nadie. Será bueno entonces poder invitar y que participen como uno más a funcionarios públicos, legisladores, periodistas, o artistas. Es un lugar donde podemos pensar un poco más que frente al televisor o la computadora y donde sobre todo podemos hacerlo en grupo y como decíamos cara a cara.
Es importante tener en cuenta que cuando más participativo se prevea un encuentro, tanto más hay que planificarlo, aunque parezca una contradicción. Y acá la figura del coordinador es clave. Éste coordinador, apoyado en los Cuadernos de Apuntes sobre el Proyecto, en su propia formación, en los medios de comunicación o blogs ideológicamente afines y en su experiencia de vida, ayuda a que el grupo crezca, profundice, establezca relaciones, integre la coyuntura con procesos estructurales. Ejemplifica, utilizando lo que va surgiendo del grupo, de los participantes, evitando que algunos se enamoren de su propio discurso y monopolicen la palabra.
El coordinador hace valer, sin prepotencia, nuestras ventajas comparativas como proyecto político: antecedentes históricos, medidas de gobierno, paralelismos con procesos populares de países hermanos (MINIMO COMUN MULTIPLO), contradicciones con potencias hegemónicas (MAXIMO COMUN DIVISOR). Con las ZONCERAS DEL SIGLO XXI confronta las falacias y mentiras del arsenal mediático opositor. Su función principal es entonces motivar a los participantes a comprender más y mejor la realidad. El coordinador es un militante/dirigente que recupera -como hemos recuperado el sentido de la política- su propio rol en la construcción y en el hacer de la historia. Tiene que estudiar, pensar, preparar las reuniones, y estar atento a lo que traen como preocupación y entorno vital quienes se acercan a participar.
Lo importante es aprender a no discursearnos entre nosotros. No ser egocéntricos, sino propiciar la autoestima, la conciencia y la pertenencia colectiva. No es fácil. Pero lo realizado ayuda, lo pendiente convoca, el contexto alimenta y la inteligencia puede movilizar lo mejor de la condición humana.
El proceso que estamos viviendo tiene todas las semanas “tela para cortar” y “jugo para exprimir”. Situaciones emergentes que se relacionan con reparaciones de un pasado doloroso y realizaciones que son plataforma de un despegue nacional y un futuro más justo y más feliz.
El secreto de los círculos abiertos de participación es hilvanar en el diálogo aquello de que ”todo tiene que ver con todo”.
Las mateadas son el momento donde todos comprendemos por qué y para qué.
De las mateadas nos vamos sabiendo que nadie es imprescindible, pero todos somos necesarios. Habrá quienes libremente, sin presiones, quieran dar un paso más y comprometerse con esta causa. Entonces será el momento del cómo y el con quién. Habremos dado un paso de la participación en el debate, al compromiso en la organización, agregando un grano de arena en la gigantesca construcción política que necesitamos para defender y profundizar nuestro Proyecto Nacional y Popular.